CHALLENGE ROTH, ANDREAS RAELERT & CHRISSIE WELLINGTON.
A punto de cumplirse 4 años de el día que se batieron los récords en la distancia Ironman, Andreas Raelert, batió el record a Marino Vanhoenacker apenas una semana después, ya que el belga hizo un tiempo en el Ironman de Austria de 7 horas, 45 minutos y 58 segundos. Poco le duró, a pesar del carrerón casi perfecto que se marcó. Pero ANDY, lo hizo de sobresaliente alto, los dioses estaban con el. El día fue bueno, con buenas condiciones, y él estaba en el mejor momento de forma, todo le salió de maravilla. Un proceso invernal de máximo entrenamiento, y su preparación exquisita para llegar a esta prueba al máximo nivel, para marcar el mejor tiempo de la historia en la distancia Ironman: 7 horas, 41 minutos y 33 segundos. Una entrada espectacular y como siempre con su clase y elegancia, sus primeras palabras fueron así: "Gracias a todo el público por llevarme en volandas hacia la meta, estoy muy feliz de haber establecido un nuevo récord mundial para ustedes" lo demás eran los cientos de aplausos que se oían del público.
El mismo día que Andreas batía el récord mundial de la distancia Ironman, Wellington hacía lo mismo, pero batiendo el récord que ella misma obtenía en esta misma prueba el pasado año. La británica fue Mega-Todopoderosa marcando un registro final de 8 horas, 18 minutos y 13 segundos. Seguramente este tiempo estará durante muchos años sin poder ser batido, ya que pocas mujeres, hoy por hoy, pueden hacer semejante tiempazo. Hay que recordar que Wellington acabó quinta absoluta con los Pros-Hombres. Ella sabía perfectamente que Roth era su carrera perfecta para dejar su sello de calidad, en cuanto a mejor tiempo se refiere. Además obtuvo su tercera victoria en esta prueba de forma consecutiva, corriendo la maratón a pie en un tiempo de 2 horas y 44 minutos.
EL DÍA DE LOS RÉCORDS: 10 de julio de 2011, nunca será olvidado en ROTH, además de ser el décimo Aniversario de esta prueba, en un día mágico. Un tiempo perfecto, con temperaturas de 25 grados, una mezcla de sol y nubes, y poco viento. Y para rematar los más de 200.000 personas que siguieron la prueba en directo fueron testigos de como los dioses Andreas Raelert y Chrissie Wellington pulverizaban los tiempos de la distancia Ironman.
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